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Cada año, los vehículos son más inteligentes y están más conectados que sus predecesores. Esto se debe al creciente número de productos de proveedores de primer nivel que los fabricantes integran en los vehículos. Muchos de estos componentes se comunican con otros componentes o con redes externaslo que abre numerosos vectores de ataque tanto en el vehículo como en la red del fabricante.
Dado que muchos vehículos nuevos contienen más de 150 ECU (y la cifra va en aumento), establecer una cadena de suministro segura es todo un reto. Sin un proceso fiable, los fabricantes de equipos originales, los vehículos y los consumidores corren peligro.
Este resumen de la solución esboza un método distribuido para asegurar el acceso a la PKI (privada) del vehículo sin exigir controles estrictos en el entorno de fabricación del OEM, al tiempo que proporciona flexibilidad a los proveedores de primer nivel.