El creciente uso de certificados digitales se está convirtiendo en un reto importante. Las organizaciones están desplegando más certificados que nunca, impulsadas por nuevas innovaciones que tanto avanzan como complican su uso. Los equipos de DevOps, por ejemplo, confían en los certificados para firmar código, pero a menudo carecen de los conocimientos necesarios para gestionarlos adecuadamente. En el ámbito de IoT, cada dispositivo requiere su propio certificado, lo que crea un enorme problema de escalabilidad.
Además, la inminente necesidad de criptografía resistente a la cuántica requerirá un cambio en los algoritmos utilizados en los certificados para asegurar la información, un proceso que es notoriamente difícil.
Hay mucho en juego. Las infracciones y los cortes de servicio son caros y pueden dañar su reputación. Las nuevas normativas de cumplimiento aumentarán aún más la importancia de una gestión eficaz de los certificados.
Para superar estos retos, necesitará políticas bien definidas, más automatización y una mejor comprensión de la criptoagilidad. Centralización de la gestión de certificados en gestión de certificados es el primer paso crucial en este proceso, ya que mejora la eficacia de la gestión de certificados ahora y en el futuro.
La centralización es una estrategia clave para agilizar las operaciones, mejorar la seguridad y mitigar los riesgos. La centralización de la gestión de certificados, en particular, ofrece numerosas ventajas que contribuyen a la resistencia y eficiencia generales de la infraestructura digital de una organización.
¿Qué es la gestión de certificados?
La gestión de certificados se refiere al proceso de supervisar, organizar y mantener los certificados digitales a lo largo de su ciclo de vida.
Los certificados digitales se utilizan para autenticar la identidad de usuarios, sistemas y dispositivos en las comunicaciones y transacciones digitales. Los certificados facilitan las operaciones criptográficas de clave pública, que permiten comunicaciones confidenciales y garantizan la integridad de los datos en tránsito.
¿Cómo es la centralización?
La gestión centralizada de certificados es la práctica de consolidar todas las tareas, procesos y recursos relacionados con los certificados en un único sistema o plataforma unificada. Permite a las organizaciones gestionar todo su panorama de certificados desde una ubicación central. Este enfoque permite una visión holística de todos los certificados emitidos, su estado y sus metadatos asociados.
Centralización consiste en reunir certificados de diversas fuentes, como autoridades de certificación (CA) internas, CA públicas y servicios basados en la nube, en un único repositorio o interfaz de gestión.
Todos los certificados en un único repositorio
La gestión de certificados digitales puede ser una tarea desalentadora, especialmente cuando se confía en gestores de certificados proporcionados por proveedores de CA que sólo cubren los certificados emitidos por su propia CA. Esto resulta especialmente problemático si se tiene en cuenta que una organización media utiliza unas nueve CA diferentes. Este enfoque fragmentado genera ineficacia y una mayor complejidad.
Imagínese la molestia de utilizar sólo dos herramientas de gestión diferentes: es el doble de trabajo y el doble de posibilidades de cometer errores. La centralización ofrece una solución sencilla al servir de centro universal para todos los certificados de su empresa. Con la gestión centralizada de certificados, se agilizan las operaciones, se reduce el riesgo de interrupciones y se mantiene un control más estricto de la seguridad.
Un único repositorio centralizado para todos sus certificados no sólo simplifica la gestión, sino que también mejora la visibilidad, garantizando que ningún certificado pase desapercibido o quede sin gestionar.
Políticas más fáciles de aplicar
La centralización proporciona a las organizaciones una visibilidad completa de todo su panorama de certificados. Con esta supervisión mejorada, pueden desarrollar y aplicar políticas y procesos que agilicen la gestión de certificados y reduzcan significativamente el margen de error.
Sin una gestión centralizada, la PKI se queda a menudo en el camino. Los equipos aislados, normalmente dentro del departamento de desarrollo, pueden adquirir sus propias soluciones de forma independiente, lo que genera redundancia y aumenta el riesgo. Estos equipos rara vez documentan sus certificados, lo que dificulta su detección hasta que caducan y provocan interrupciones.
Pocas organizaciones cuentan con equipos dedicados a la gestión de PKI y certificados. En su lugar, esta responsabilidad suele recaer en los equipos de seguridad, TI o infraestructuras, que están más centrados en tareas administrativas inmediatas que en el desarrollo de políticas estratégicas. Como resultado, las prácticas de gestión de certificados tienden a evolucionar de forma ad hoc. No es que las organizaciones adopten un "enfoque equivocado" de la gestión de certificados, sino que a menudo no adoptan un enfoque sistemático debido a la falta de experiencia y ancho de banda.
Centralizar la gestión de certificados cambia esta dinámica. Dota a las organizaciones de los datos y la información necesarios para crear políticas eficaces a largo plazo. Al hacer visibles todos los certificados, los equipos obtienen la información que necesitan para gestionar los certificados de forma proactiva, garantizando que su estrategia PKI sea sólida y resistente para el futuro.
La automatización se hace posible
Los certificados son parte integrante de la infraestructura informática moderna y su volumen no hace sino aumentar. A medida que los ciclos de vida de los certificados se acortan, la necesidad de renovaciones frecuentes se hace inevitable. La automatización evita que los equipos se vean desbordados por el enorme volumen de tareas de gestión de certificados.
Las soluciones modernas de gestión de certificados están diseñadas para descubrir, registrar y rastrear de forma proactiva todos los certificados del entorno de TI, incluidos los que están ocultos, sin rastrear y sin documentar. Este enfoque integral garantiza que no se pase por alto ningún certificado. Por término medio, las organizaciones confían en nueve CA diferenteslo que da lugar a un entorno fragmentado en el que cada CA opera de forma independiente, lo que dificulta el mantenimiento de la visibilidad y el control de los certificados.
Con la automatización, los certificados pueden renovarse automáticamente antes de que caduquen, lo que reduce la necesidad de intervención manual y disminuye significativamente el riesgo de interrupciones.
Además, la capacidad de revocar y reemitir certificados y CA en bloque permite a los equipos responder rápidamente a los problemas y compromisos, garantizando la integridad y seguridad del entorno informático.
La implantación de la automatización en la gestión de certificados mejora su eficacia Y garantiza una infraestructura de certificados más segura y conforme a las crecientes exigencias.
4 ventajas de un gestor de certificados centralizado
✔️ Las interrupciones del servicio son cosa del pasado
A pesar del crecimiento y la evolución de las soluciones de gestión de certificados, organizaciones de todos los tamaños siguen sufriendo interrupciones relacionadas con los certificados. Empresas de alto perfil como SpaceX, Microsoft y Spotify han sufrido importantes interrupciones debidas a certificados caducados, lo que pone de relieve los riesgos asociados a una gestión inadecuada de los certificados.
Según el informe 2024 PKI & Digital Trustun asombroso 81% de las organizaciones experimentaron al menos dos o más interrupciones relacionadas con certificados en los últimos 24 meses. De media, se tardan más de 5 horas y 8 miembros del equipo en identificar y solucionar estas interrupciones, lo que pone de manifiesto la importante fuga de recursos y el impacto operativo.
Estas interrupciones no son meros inconvenientes menores, sino que pueden provocar graves trastornos en los servicios al cliente, empañar la reputación de la marca y ocasionar pérdidas económicas. El tiempo de inactividad de la red no planificado causado por certificados caducados puede costar a una organización más de 300.000 dólares por hora. Al implantar un gestor de certificados centralizado, las organizaciones pueden obtener una visibilidad completa de su entorno de certificados, lo que permite una gestión proactiva y reduce significativamente la probabilidad de caducidades inesperadas.
La centralización garantiza que todos los certificados, independientemente de la CA emisora, se supervisen y gestionen desde un único repositorio. Esto no sólo simplifica el proceso, sino que también elimina los silos que a menudo conducen a descuidos y errores. Como resultado, las organizaciones pueden aplicar políticas coherentes, automatizar los procesos de renovación y responder con rapidez a los posibles problemas, evitando eficazmente las interrupciones y garantizando unas operaciones sin problemas.
✔️ Los equipos tienen más ancho de banda
El sector de la ciberseguridad se enfrenta actualmente a una importante escasez de mano de obra, lo que hace que la gestión eficaz de los recursos sea más crítica que nunca. La demanda de profesionales cualificados en ciberseguridad es alta, y la diferencia entre oferta y demanda es cada vez mayor. Se calcula que que hay más de 3,5 millones de puestos de ciberseguridad sin cubrir en todo el mundo, lo que agrava la presión sobre los equipos existentes.
La gestión centralizada y automatizada de certificados puede desempeñar un papel crucial para aliviar la carga de trabajo de los equipos de ciberseguridad. Cuando la gestión de certificados está centralizada, elimina las ineficiencias de los sistemas fragmentados en los que los distintos equipos gestionan sus propios certificados de forma aislada. Esto no sólo agiliza los procesos, sino que también mejora la visibilidad y el control en toda la organización, lo que permite a los equipos aplicar políticas coherentes y evitar errores.
La gestión centralizada y automatizada de certificados puede resolver eficazmente la escasez de mano de obra en ciberseguridad, ya que ahorra tiempo a las organizaciones y mejora su postura general de seguridad.
✔️ Los equipos se vuelven más criptoágiles
La criptoagilidad es la capacidad de actualizar y cambiar los procesos criptográficos de forma rápida y eficaz sin causar interrupciones significativas en los sistemas de TI. A medida que la tecnología evoluciona, la necesidad de criptoagilidad se hace más acuciante.
La computación cuántica, con su potencial para romper los algoritmos criptográficos actuales, es uno de los principales motores de este cambio. Las organizaciones deben estar preparadas para pasar rápidamente a métodos criptográficos resistentes a la cuántica. Además, el creciente rigor de las normativas de cumplimiento exige una rápida adaptación a las nuevas normas y prácticas criptográficas.
Tradicionalmente, la transición de los procesos criptográficos ha sido una tarea lenta y difícil. Sin embargo, las organizaciones ya no pueden permitirse tales retrasos. La implantación de prácticas criptoágiles permite transiciones más fluidas y garantiza que las medidas de seguridad sigan siendo sólidas y conformes con las normas en evolución.
En el futuro, la capacidad de realizar estos cambios con rapidez será crucial. Las organizaciones necesitan establecer marcos que apoyen la criptoagilidad, permitiéndoles actualizar los algoritmos y procesos criptográficos sin problemas. Este enfoque proactivo no sólo mitiga los riesgos asociados con la criptografía obsoleta, sino que también posiciona a las organizaciones para mantenerse a la vanguardia frente a las amenazas emergentes y las demandas regulatorias.
✔️ Los equipos ahorran tiempo y dinero
Implantación de un gestor de certificados centralizado puede reducir significativamente los costes asociados a la gestión de certificados. Al consolidar las herramientas y la infraestructura, las organizaciones pueden agilizar las operaciones y reducir la carga financiera.
Menos herramientas. Utilizar varias herramientas de gestión de certificados puede resultar caro e ineficaz. Cada herramienta suele requerir su propio conjunto de recursos, licencias y esfuerzos de mantenimiento. Al centralizar la gestión de certificados, las organizaciones pueden eliminar las herramientas redundantes, lo que se traduce en un ahorro directo de costes. Una única plataforma unificada reduce la complejidad y los gastos generales asociados a la gestión de sistemas dispares.
Ahorro de horas. Gestionar certificados manualmente o con herramientas fragmentadas requiere mucho trabajo y es propenso a errores. Un gestor de certificados centralizado automatiza muchas de las tareas rutinarias implicadas en la gestión del ciclo de vida de los certificados, como la detección, supervisión, renovación y revocación. Esta automatización reduce significativamente la carga de los equipos de TI y seguridad, liberándolos para que puedan centrarse en actividades de mayor valor. La reducción de la carga de trabajo manual se traduce en un importante ahorro de costes laborales.
Los 3 mejores: Qué buscar en un gestor de certificados
Seleccionar el gestor de certificados adecuado es crucial para garantizar una gestión del ciclo de vida de los certificados segura y sin fisuras. He aquí tres características clave a tener en cuenta.
Una experiencia de "cristal único
Un gestor de certificados sólido debe proporcionar una interfaz centralizada y unificada que pueda capturar, registrar, rastrear y gestionar todos los certificados y tipos de certificados, sin excepciones. Este enfoque de "cristal único" garantiza una visibilidad y un control completos de todos los certificados dentro de la organización, eliminando la necesidad de múltiples herramientas dispares y reduciendo el riesgo de supervisión.
Opciones de implantación flexibles
La flexibilidad en el despliegue es esencial para adaptarse a las distintas necesidades organizativas. Un gestor de certificados debe admitir implantaciones tanto en la nube como en las instalaciones, así como ofrecer opciones autogestionadas o como servicio. Esta flexibilidad permite a las organizaciones elegir el modelo de despliegue que mejor se adapte a su infraestructura, requisitos de seguridad y preferencias operativas.
Respaldado por PKI y experiencia en gestión de certificados
La experiencia en PKI es escasa y a menudo no es factible desarrollarla internamente. Un gestor de certificados de primer nivel debería tener acceso a expertos en PKI y servicios de asistencia. Estos expertos pueden ayudar a diseñar e implantar soluciones PKI, estructurar las CA y tomar decisiones informadas que se ajusten a la estrategia de seguridad más amplia de la organización. Tener acceso a este nivel de experiencia garantiza que el sistema de gestión de certificados no sólo se implemente correctamente, sino que también se optimice para el éxito a largo plazo.
¿Quiere saber más? Consulte nuestra Guía del comprador de gestores de certificados y aprenda a evaluar las soluciones PKI que se adaptan a la fase de crecimiento de su empresa.
La gestión centralizada de certificados es clave
Organizaciones varían mucho en sus enfoques de la seguridad de la gestión de certificados.
Al centralizar la gestión de certificados, las organizaciones obtienen una visibilidad esencial de su entorno de seguridad, independientemente de su nivel de madurez actual. Esta visibilidad sienta las bases de la escalabilidad y la seguridad, permitiendo a las organizaciones identificar vulnerabilidades, agilizar procesos y reforzar su postura general de seguridad de cara al futuro.
Comienza tu viaje
La centralización permite a las organizaciones navegar por las complejidades de la gestión de certificados y salvaguardar sus infraestructuras digitales. Para saber cómo Keyfactor puede ayudarle, póngase en contacto con nosotros o vea una demostración para ver el poder de la gestión centralizada de certificados.